29/04/2021
Santos Santolino: “Hay que hacer reflexionar a la sociedad sobre los beneficios que recibimos de los plásticos y su contribución al bienestar del que disfrutamos hoy en día”
Ofrecer productos de calidad ha sido una prioridad para la industria de los plásticos, que se ha caracterizado a lo largo de su historia por buscar soluciones para las necesidades de la sociedad. Este 2021 se cumplen 50 años desde que esa voluntad de defensa de la calidad se convirtió en una realidad constatable con la entrega de la primera Certificación de Marca de Calidad de Plásticos Españoles a la empresa SAENGER, por sus tubos de PVC no plastificado para conducción de agua a presión.
La iniciativa de esta Marca de Calidad fue de ANAIP, que la mantuvo durante 19 años para después cedérsela a AENOR. Siguiendo todo este proceso estuvo Santos Santolino, vinculado al CTN 53 desde su inicio en 1965 y que hoy es Presidente tanto del Comité Técnico de Normalización de UNE, CTN 53 Plásticos y Caucho, como del Comité Técnico de Certificación de AENOR, CTC 001 Plásticos.
Se acaban de cumplir 50 años de la Certificación de Plásticos en España gracias a la iniciativa de ANAIP de crear la Marca de Calidad Plásticos Españoles ¿qué ha aportado esta iniciativa a la industria de los plásticos desde entonces?
La posibilidad de que una entidad de certificación independiente diera fe del cumplimiento de un producto con los requisitos y exigencias de calidad definidos en una norma, lo que implicaba que el fabricante dispusiera de medios para la verificación permanente de su calidad, lo que además de darle prestigio a la empresa, traía consigo que al comercializar el producto el fabricante pudiera demostrar ante sus clientes, prescriptores y consumidores que sus productos cumplían con las prestaciones que definían la norma correspondiente. Esto no dejaba de ser un elemento diferenciador frente a otras empresas del sector que no disponían de esta certificación y ponía en valor el esfuerzo realizado por esa empresa en pro de su compromiso con la calidad.
ANAIP mantuvo esta certificación durante 19 años, para transferírsela después a AENOR ¿En qué consistía la certificación? ¿Qué requisitos tenían que cumplir las empresas para conseguir esa Marca de Calidad de Plásticos Españoles?
Dado que esta Marca de Calidad era una certificación de conformidad con norma UNE, para que una empresa la pudiera ostentar tenía que probar que el producto a certificar cumplía con las exigencias de la norma a la que se refería. El proceso comenzaba con la visita de un técnico experto a las instalaciones de la empresa para realizar una inspección exhaustiva del cumplimiento por parte del fabricante, verificando que este control interno seguía las pautas marcadas en el reglamento específico del producto en cuestión. Después se realizaban una serie de ensayos a pie de almacén de la fábrica y se tomaban muestras aleatorias para la realización de ensayos en un laboratorio independiente y de reconocido prestigio. Todo esto daba lugar a unos informes que se evaluaban en la Comisión de Gobierno de la Marca, y solo en el caso de que todo fuera conforme se acordaba la concesión.
Esta certificación no se concedía de por vida, sino que una vez conseguida, el producto se veía sometido a un seguimiento continuo del cumplimiento, para lo cual se repetía, con la frecuencia que correspondiera, la visita de inspección en fábrica y ensayos en laboratorio.
Es de destacar que esta certificación fue reconocida más tarde por el entonces IRANOR –que más adelante se conocería como AENOR– como Marca de Conformidad con norma UNE, autorizando a que los productos certificados pudieran ser marcados.
Cuando se entregó la primera certificación de plásticos en España en 1971 tú ya llevabas años trabajando en el sector y ya estabas vinculado al CTN 53. ¿Cuál fue el origen de la certificación de plásticos en España y de la creación de la Marca de Calidad de Plásticos Españoles? ¿Cómo se fue desarrollando la iniciativa en esos años?
La Marca de Calidad Plásticos Españoles fue pionera en España. La iniciativa la tomaron un grupo de visionarios, empresarios adelantados a su época, que en la segunda mitad del 1970 propusieron a ANAIP –de la que eran socios– la creación de un comité totalmente independiente y con una composición equilibrada de forma que todos los intereses estuvieran representados: administración, usuarios, laboratorios, centros de investigación, fabricantes…, y que una vez creado se denominó “Comisión de Gobierno de la Marca de Calidad Plásticos Españoles”. Esta comisión se encargaría de elaborar los procedimientos a seguir para poder certificar que un producto, en este caso de material plástico, cumplía con las especificaciones recogidas en la correspondiente norma UNE. En aquel entonces, en España apenas se conocían las certificaciones voluntarias y por terceros que además se basaran en normas.
Esta iniciativa fue respaldada por ANAIP y se puso en marcha en pocos meses gracias a la colaboración del Instituto de Ciencia y Tecnología de Polímeros de C.S.I.C. –que entonces era el Instituto de Plásticos y Caucho– que ofreció personal experto y sus laboratorios para realizar los ensayos. En octubre de 2002 CEIS –el Centro de Ensayos, Innovación y Servicios– se hizo cargo de esta actividad.
¿Cuáles fueron los primeros productos que recibieron esta marca de calidad?
Comenzó con tubos de PVC para la conducción de agua a presión y continuó con tubos de PE. A lo largo de los años se fue extendiendo la gama de productos a certificar con algunos tan diversos como perfiles para persianas, placas de poliéster fibra de vidrio, compuestos de materiales termoestables para moldeo, bolsas para recogida de basuras, jeringuillas de plásticos para usar una sola vez, etc.
Has dedicado gran parte de tu vida profesional a la Normalización y la Certificación. Ya nos has comentado qué aporta la certificación pero, en síntesis y para que lo entienda la gente que no trabaja en el sector ¿Qué aporta la normalización a la industria de los plásticos?
La normalización de plásticos y caucho en España, en la que se apoyó ANAIP para la certificación en el año 1971 y de la misma manera hizo AENOR en el año 1988, se inició formalmente con la creación a mediados de los años 60 del Comité Técnico de Normalización de Plásticos y Caucho, CTN 53, que desde sus orígenes se ha mantenido como uno de los comités con mayor número de normas publicadas.
Aporta muchos beneficios a la industria, como facilitar la comercialización, disponer de una herramienta para probar la calidad y seguridad de los productos, mejoras en la producción y reducción de costes, mejoras de la calidad, en la competitividad de las empresas, en acceso a mercados internacionales, ayudan a disminuir costes y evitan barreras comerciales, entre otras cosas.
¿Cómo has visto la evolución de la industria de los plásticos durante toda tu carrera profesional y cómo valoras el momento actual?
Si nos remontamos a los años 70 del pasado siglo que fue cuando comencé a conocer la industria, desde entonces he observado una continua renovación de los medios productivos, maquinarias y equipos, así como su automatización, buscando el incremento de su rendimiento y la mejora de la calidad de los productos fabricados mediante el acceso a nuevas tecnologías. Recientemente, hay que añadir la digitalización de procesos productivos con objeto de mejorar su eficiencia y competitividad.
Respecto a materias primas, la mejora de prestaciones de los plásticos commodities, o el mayor empleo de plásticos técnicos o de altas prestaciones, como es el caso del polióxido de fenileno, poliamidas, polisulfonas, y otros muchos, o mejoras de prestaciones de las ya más empleadas hasta ahora, ha posibilitado el desarrollo de nuevos productos para nuevas aplicaciones, y mejorar la calidad de los ya más empleados, facilitando la apertura de nuevos mercados.
Además, cada día se valora más la calidad de los plásticos y sus prestaciones. Como consecuencia de todo esto hoy día ha cambiado radicalmente la opinión que todavía se mantenía hasta no hace demasiados años de que la palabra plástico era sinónimo de baja calidad.
¿Cómo crees que se puede mejorar la percepción que tiene la sociedad de los plásticos y valorar su aportación a la calidad de vida que disfrutamos hoy en día?
A los “negacionistas” que reniegan de los plásticos por entender que son los causantes de todos los problemas medioambientales que sufrimos y que sienten que son materiales prescindibles, les explicaría que los plásticos, durante su uso, además de ofrecer un buen servicio, en sí mismo no contaminan, o si en algunos casos en etapas de su fabricación lo pueden hacer, es en mucha menor medida que otros materiales que se emplean o se pudieran emplear para ese mismo uso.
Reconozco que pueden contaminar el medio ambiente cuando al final de su vida los eliminamos de forma incorrecta sin tener en cuenta las consecuencias que eso puede tener y olvidando que estos materiales son reciclables y que está en nuestras manos tomar todas las medidas para proteger el medio ambiente. Todo esto sin dejar de reconocer que además de los consumidores, las empresas fabricantes de plásticos claramente tienen un papel fundamental que desempeñar en el compromiso de tomar todas las medidas a su alcance, lo que me consta que la mayoría de ellas ya están haciendo, para evitar problemas medioambientales, como reducir la cantidad de residuos que generan y emplear en lo posible materiales reciclados.
Es importante poder influir para que la sociedad reflexione sobre los beneficios que recibimos de los plásticos y su contribución al bienestar del que disfrutamos hoy en día.
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